Son una asociación sin ánimo de lucro, una gran familia que invierte su tiempo y se busca la vida reciclando e innovando para llevar unos de los diseños más reconocidos en el Carnaval de Badajoz.
Han cosechado diversos premios a lo largo de su trayectoria, el más importante un 2° premio en el año 2005.
En 2017, con “De africanos vamos y como aborígenes bailamos”, hicieron referencia a una tribu pérdida del África más profunda, cuyos miembros se dedican a utilizar los ritmos y danzas tribales para invocar a los espíritus. Además de llevar una conjunción del disfraz, la música y la coreografía, han arriesgado inventado una lengua nueva.
Ganaron el 5º premio en disfraz individual infantil en 2017.
